Claro de luna
Claro de luna, noche perpetua.
Solo se escucha el sonido
sibilante del viento frío y gélido
invierno que acaba de empezar.
Carlos vaga por las calles desiertas
con su alma rota, su alma en pena,
buscando un rincón donde hallar
un poco de paz, de serenidad.
se dirige al puente y, antes de
cruzarlo, se detiene un momento
a observar el reflejo de la luna,
tan pura, blanca y cristalina,
en el río que hay bajo él,
y en ese instante se percata
de una barca que hay justo
al lado del reflejo, dentro de
la cual se encuentra una mujer.
Observa su cara y sonrie, pues
reconoce ese rostro, es aquél
que hace años tuvo que ver
marchar lejos, muy lejos.
Baja veloz hacia el río, y al llegar
a la orilla, se da cuenta que tiene
que nadar si quiere alcanzar la barca.
No se lo piensa, se introduce
en el agua, y al llegar a ella pronuncia
su nombre con voz dulce, suave.
Ella se gira al verle, le ayuda a subir,
y una vez dentro se miran.
Laura deja caer una lágrima,
pues había esperado ese momento
mucho tiempo, no le olvidó nunca.
Carlos acaricia su pelo, la sonríe
y la besa en esa noche inolvidable.
Comentarios
Gracias por tu comentario en mi blog.
El anterior post me ha parecido equilibrado y lleno de encanto,amiga.
Quise comentarte,pero el sistema no me dejó.Espero que ahora si me deje.
Mi felicitación y mi abrazo inmenso.
M.Jesús
felicitaciones
un abrazo y feliz jueves
Un abrazo en la noche.
Un abrazo.
http://megustadescubrirte.blogspot.com/2012/06/muy-lejos-de-ti.html
Es mi nuevo texto... me lo ha recordado tu poema...
Besos, amiga...
Besos...