Psicología de un masaje
Es sabado por la mañama. Me visto y voy a preparar la sala. Enciendo las velas, caliento el aceite, pongo música de Enya que invita a la relajación y ambiento la sala con aroma de violetas. Salgo a buscar a mi primer cliente. Esta sentado en el sofá esperando para entrar. Le saludo y le invito a pasar. Mi primera impresión es la de un hombre de mirada triste, apagada. Le pregunto que tal se encuentra, me dice que tiene el cuerpo dolorido y que lleva con jaquecas desde hace varios años. Le digo que no se preocupe, que le intentare aliviar. Se acomoda y comienzo el masaje. El aceite ya está caliente, lo vierto sobre mi mano y lo extiendo en su cuerpo frío, tenso, agarrrotado. Me empieza a contar una historia sobre su hijo pequeño, una historia que me conmueve profundamente, y que me hace darme cuenta de que el motivo de tantos años de jaquecas son debidas al sufrimiento por el que esta pasando. Le escucho en silencio, mientras deslizo suavemente mis dedos sobre su piel, con movimientos lentos pero intensos. Puedo leer con mis manos el lenguaje de su cuerpo. Relajo mi mente, y, a medida que avanzo, puedo sentir como le voy transmitiendo esa paz, esa serenidad que tanto necesita. Su cuerpo se va relajando hacia un mundo de bienestar físico y mental. Termino el masaje pasando mis dedos con suavidad sobre su cuerpo ahora renovado. Le cubro con la toalla y dejo que vuelva poco a poco a la realidad, pero una realidad muy diferente. Se levanta despacio, y veo a un hombre nuevo, con una mirada brillante, llena de luz y de vida. Me sonrie y me da las gracias por devolverle una parte de su vida.
Comentarios
abrazos y feliz semana
Me ha recordado tu relato a una buena
amiga que tiene un don, el de escuchar
apenas si te habla pero te escucha y
solo con la mirada y unos pequeños
gestos es suficiente, lo mismo que tu
protagonista con sus manos.
Un fuerte abrazo y te dejo con tus
masajes. . .
Enhorabuena por esa capacidad de introducir al lector en tus textos. Un abrazo.
Un abrazo.
Yo quiero...;)
Buenísimo,Alicia!
ABRAZOS MILES.
FELIZ SEMANA.
Preciosa entrada, es bello trasmitir alegría y serenidad a otra almas, abrazo.
Este blog tiene eso, gracias.
Me encanta
Besos
Un masaje para repetir.
Tienes que ser muy buena con las manos.
mira, estuve sin internet el fin de semana, asi que me dediqué solamente a trabajar (remodelación de habitaciones) me duelen hasta las uñas...
necesito uno de esos pero doble
me reservas un turno? =)
Te deseo una gran semana
besitos
si es totalmente así cuando
uno emprende ese viaje de relax
total..
Sabes soy masajista, y lo
puedo vivir día tras día.
Es gratificante dar alivio a
los pacientes..
Un abrazo, bonito inicio
de semana...
Un fuerte abrazo, querida Alicia.
Mi felicitación y mi abrazo grande,compañera y amiga.
Feliz Semana Santa.
M.Jesús